¿Por qué un blog?

Como profesora de Religión en un centro público de enseñanza secundaria, me ocurren muchas cosas a diario en mi trabajo. A veces, sólo por ser profesora, otras veces por se la de Religión.
Son muchas las ocasiones en las que necesito gritar, desahogarme y contar las injusticias, las tontunas, los atropellos que sufro en mi día a día. Pero lo voy a hacer en un cubo, para poder más tarde reciclar mis propias experiencias.
Quiero sentirme libre y no quiero ofender a nadie, por ello no citaré datos que identifiquen al centro, compañeros o alumnos.
Sólo quiero compartir lo que pienso y lo que siento, casi ni necesito que me lea nadie.
Pido a Jesús, por medio de María, su santísima madre, que me dé las luces necesarias para poder expresarme con valentía, equidad, justicia, y humildad.
Pero no descarto que, en algún momento, mis sentimientos afloren tal cual los vivo.

martes, 27 de marzo de 2012

ORACIÓN POR MIS DIRECTIVOS




Señor, te presento a estas personas que componen la junta directiva de mi centro: director, jefe de estudios y secretario.
Sé que tienen mucho trabajo y que no debe resultar fácil realizarlo cada día.
Por eso te pido por ellos. Dales luz para que puedan guiar esta barca durante el presente curso.

Cada uno tiene sus cualidades personales. Dales inteligencia para que puedan ponerlas al servicio de la sociedad, de los alumnos y de los profesores.



Cada uno tiene su escala de valores. Que puedan obrar con justicia y buscar en todo momento el bien general, aunque eso suponga saltarse alguna norma de vez en cuando.


Cada uno tiene su carácter. Dales cordialidad, para que sepan tratar a los profesores como compañeros y no como súbditos o como enemigos. Y dales humildad para que no pierdan el tiempo en regodearse en su propia prepotencia. Que no caigan en la tentación de creerse más importantes que los demás.



Dales humanidad para que en el trato diario sepan confiar en sus compañeros y preocuparse sinceramente por ellos, por sus problemas laborales y también por sus problemas personales.




Que acierten a buscar lo mejor para los alumnos del Centro. Dales fuerzas para luchar por todas las cosas buenas que enriquecen a nuestros chicos y chicas y para apoyar a los profesores que lo hacen.

Señor, pon una sonrisa en sus rostros, sobre todo cuando han de amonestar a alguien, y que cuando nos reprochan que somos imperfectos no se olviden de su propia imperfección.

Señor, Tú dijiste “el que quiera ser el primero entre vosotros sea vuestro servidor”, por eso te pido hoy por estas personas (director, jefe de estudios, secretario), que tienen el difícil honor de ser los que organizan y marcan el rumbo de la tarea educativa de nuestro Instituto. Para que no olviden en ningún momento que la labor que están realizando es un servicio.

Dales, Señor, luz para su inteligencia, fuerzas para su voluntad y sensibilidad para su corazón. Te lo pido a ti, que eres el único Maestro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario